¿Tendrá fiebre?
Todos los que tienen un amiguito peludo en casa han sentido en alguna ocasión la frustración de no saber lo que le ocurre. Seguro que alguna vez has pensado: “Si pudiera hablar me podría decir lo que le ocurre”.
No sigas preocupándote porque, aunque tu perro no hable con un lenguaje oral humano lo hace con su propio lenguaje corporal y con sonidos que aprenderás a interpretar.
En este artículo hemos decidido centrarnos en la fiebre porque es un síntoma de muchas posibles causas y es posible que a lo largo de vuestra convivencia este síntoma haga su aparición. Saber detectar la fiebre le dará a tu perro la ventaja del tiempo.
¿Qué temperatura tienen los perros?
Detectar si un perro tiene fiebre es importante, ya que puede deberse a infecciones o enfermedades que deben ser tratadas con urgencia. Debes saber que la temperatura normal de un perro está entre los 38 y los 38,5 grados.
¿Cómo detectar la fiebre en tu perro?
Una de las mejores maneras de saber si nuestro perro tiene fiebre o no es observar su comportamiento. Es importante tener en cuenta cualquier cambio que pueda ocurrir en su cuerpo. Los más comunes son:
- Nariz caliente y seca
- Carácter nervioso y apático.
- Ojos llorosos
- Temblores que aparecen con altas temperaturas.
Si tu perro tiene uno o más de estos síntomas, lo mejor que puede hacer es usar un termómetro de oído.
Aunque lo más recomendable es acudir al veterinario para determinar las causas y definir el cuidado de tu mascota, hay algunas cosas que puede hacer en casa mientras tanto.
Sin embargo, es importante enfatizar que, no debes dejar a tu perro con fiebre más de 48 h sin acudir al veterinario.
Estas son algunas de las cosas que puedes hacer en casa para aliviar la fiebre hasta llegar al veterinario.
- Refresca las piernas y orejas. Moja estas áreas del cuerpo para enfriarlo. No dejes de medir la temperatura constantemente, porque cuando alcanza los 39 grados, puedes dejar de hacerlo.
- Mantenlo hidratado. Tienes que dar a tu mascota mucha agua para beber y así bajar la fiebre.
- Aplica una compresa fría en su estómago. Es posible que intente revolverse, pero cuando sienta sus efectos lo aceptará.
- No lo laves con agua fría, ya que puede producirse un cambio de temperatura corporal demasiado brusco que no es recomendable en su actual estado.
- No le des medicamentos para humanos o animales si no han sido recetados por el veterinario.
- Nunca uses hielo, especialmente si piensas que su amento de temperatura podría estar relacionado con un golpe de calor. Será suficiente usar agua fresca.
Aunque estos consejos te ayudarán a mantener tu mascota un poco mejor no olvides que la fiebre es un síntoma y el veterinario debe determinar su origen y tratamiento.